Vocaciones

Sin inclinarte…

no podrás ver el dolor en los ojos de tu hermano, 

ni el candor en los ojos de un niño.

Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad